INVESTIGACIÓN. El cadáver, hallado en la represa Agoyán, sería de la maestra de Pujilí. Sus alumnos y compañeros de trabajo fueron a su velorio
La unidad educativa Belisario Quevedo, de Pujilí, está de luto tras perder a una de sus docentes, quien contaba con 27 años de trayectoria. Su cadáver fue hallado el último domingo flotando en la represa hidroeléctrica Agoyán de Baños de Agua Santa, en Tungurahua.
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Patricia Riera, de 54 años, era la única hija de la familia Riera Peñaherrera. Era soltera y vivía sola tras la muerte de su madre hace dos años.
Procedimiento Los trabajadores de la represa hallaron el cadáver y dieron aviso al ECU-911, entidad que coordinó con el Cuerpo de Bomberos de Baños y la Policía. Tras su recuperación, el cuerpo fue embarcado en la ambulancia de Medicina Legal y trasladado hasta el Centro Forense de Ambato para la necropsia de Ley. Posteriormente fue retirado por los familiares.
Despedida En medio de la consternación, el pueblo pujilense levantó una capilla ardiente en las canchas del mercado Augusto Lema Enríquez. A las 14:10 llegaron los restos de Patricia Riera. Estuvieron sus compañeros de la unidad educativa Belisario Quevedo, alumnos, padres de familia, autoridades y ciudadanos, quienes dieron el ultimo adiós. A las 17:00 se realizó la misa campal y, finalmente, su cuerpo fue sepultado.
EL DATO La educadora fue reportada como desaparecida hace 10 días.Sus amigos y familiares piden que este caso se indague, ya que les ha conmocionado la manera como ella apareció muerta, por lo que presumen que alguien terminó con su vida. A Elena Cruz, propietaria de la vivienda donde habitaba, se le quiebra la voz al momento de describir a ‘Paty’, como cariñosamente le decía. “Era alegre, dinámica y buena persona”, comentó.