Desde que se colonizó la zona del oriente, se han registrado fenómenos paranormales como voces que se escuchan de la nada, o luces misteriosas en la zona de la vía Gualaceo Limón, sector sierra, entre la Virgen y los Ingamullos, aproximadamente una zona de unos 15 kilómetros, a unas dos horas de Limón y 30 minutos de Gualaceo. Por ser personas de bien quienes han testificado, se descarta superchería popular o ebriedad en sus narraciones
A mediados de los 80s, un trabajador del antiguo Mtop Juan Lozano, llevó un radio al radiotécnico del cantón Limón, Antonio Ochoa. El radio tenía sus formas y piezas quemadas, como que estaba cerca de un calor intenso. El técnico preguntó que ocurrió, si lo había puesto cerca de una fogata y el señor Lozano indicó que no, que la noche anterior mientras dormían en una carpa con sus compañeros, una luz intensa apareció y todos huyeron despavoridos, cuando regresó, el radio había callado y mostraba huellas de quemadura.
Por la misma zona, Lizbeth, una colegiala, venía junto a su familia al oriente. Pararon para hacer sus necesidades biológicas y escucharon risas en la nada, su padre entró en pánico y pidió a todos subir a la camioneta para huir despavoridos.
La zona es normalmente desolada, En la fotografía, un tramo de la vía, entonces en pavimentación
En el año 2005, un profesor universitario junto a su esposa, su cuñado y sus dos niñas, venían desde Cuenca a Limón y ya cerca a la Loma de la Virgen, una de las niñas pijo que quería orinar. El tío la dijo: "Belén, espérate un ratito que ya mismo llegamos a La Virgen".
El sector de la Virgen, es aprovechado por algunos viajeros para agradecer algún milagro o simplemente estirar las piernas luego de un viaje
El plena Virgen, a las 11 de la mañana, paró el carro y de la nada, se escuchó la voz de una mujer que hablaba un idioma que no se entendía. Presas de pánico se miraron uno a otro.
La mujer del profesor se puso histérica a rezar el padre nuestro de modo incoherente mientras que él y su cuñado, venciendo el parvo, buscaron a la redonda el origen de esas voces. Para quienes han pasado por allí, saben que no existen casa, kilómetros a la redonda.
Estos casos, de luces y sonidos misteriosos, no son nuevos. Muchos taxistas, camioneros y ancianos han atestiguado fenómenos paranormales en diferentes tiempos.
El último, el caso del director del periódico El Pueblo, desaparecido desde el día Sábado 6 de agosto en Ingamullo. El mismo sitio en donde en el 2019, desapareció sin dejar rastro alguno, José Quintanilla, operador de la constructora HH, que despejaba la vía. La máquina fue a parar al fondo del abismo de 150 metros de profundidad, pero pese a la intervención de personal experto en rescates, bomberos, drones, etc, nunca se encontró su cuerpo, aunque si algunas prendas personales.
Jose Quintanilla, desaparecido en Ingamullo (lugar donde se tomó la foto). a la derecha, la cargadora que fue a parar al fondo del abismo
El señor Quintanilla, había hecho planes para celebrar el cumpleaños de su hija de 11 años. El Sábado, se contacó con su esposa y la había pedido pague unas facturas, indicado que viajaría del campamento de Ingamullo a Cuenca, para festejar a su niña, el Sábado próximo. El día Martes, desapareció.
Fernado León, desaparecido sin dejar rastro en la misma zona, 3 años después
El Sábado pasado, 6 de Agosto del 2022, el director del semanario El Pueblo, Fernando León, había indicado a su familia que iría a hacer un reporte del mal estado de la vía Gualaceo Limón para su diario. Salió a las 7:40 Am y nunca más se supo de el.
Se encontró su auto al fondo del abismo, pero su cuerpo jamás.
La búsqueda continúa hasta el momento con bomberos y personal del Grupo de Operaciones de Emergencia de la Policía
que han peinado el barranco, siguiendo las huellas que había dejado el carro en su caída, pero no se le encontró alseñor León. Se buscó también a orillas del río, hasta unos tres kilómetros aguas abajo, sin resultados positivos.
Solo se encontró un canasto con unos choclos, un zapato deportivo color azul, el celular de Fernando y, otras pertenencias.
Durante la verificación de lo que había quedado del automotor, se pudo determinar que el switch estaba apagado, el cinturón de seguridad estaba como si no se hubiese usado.
Por las huellas dejadas por el vehículo, y el estado en el que lo halló en el fondo del precipicio, se presume que el coche habría rodado apagado y de retro.
Por varias ocasiones, al menos 5, la imagen de la Virgen, a sido robada y recuperada por desconocidos, quizá satánicos, protestantes, supersticiosos que quieren que sus hijos lleguen a USA, etc
El hecho de que existan dos represas más abajo del a zona de Ingamullo (donde han caído los vehículos), agranda el misterio pues, ningún cuerpo pasaría desapercibido de llegar allí y sin embargo, los personas, jóvenes, 56 y 54 años, desaparecieron sin dejar rastro alguno.
Conjeturas de personas se han lanzado: que se suicidaron, que la mafia los secuestró, que quisieron desaparecer, que habita un duende en la zona...