José Jonas, fue detenido en la localidad de San Pedro, Parroquia Cañaribamba.
Luego de incinerar el cuerpo de su exconviviente, descuartizarlo y enterrarlo en la parte posterior de su domicilio, creyó que nadie encontraría el cadáver de Rosa Sacasari. Pero al verse acorralado por la Policía confesó ser el autor de este femicidio, presumiblemente ocurrido el 27 de Mayo del 2020.
Rosa Sacasari Heras, de 39 años de edad, fue reportada como desaparecida y su paradero era incierto.
Los uniformados recorrieron varios lugares donde podría estar la mujer hasta que llegaron a la casa de José Jonás L.L., y notaron que en el piso había una mancha de sangre. Con ese indicio empezaron a buscar presuntas evidencias y ante la presión de los delegados de la Fiscalía y la Policía confesó.
Aquí, el parte del juicio de la Fiscalía del Ecuador:
Cuenca (Azuay), 01 de agosto de 2022.- José Jonás L. deberá cumplir una condena de veintiséis años de privación de libertad, luego de que la Fiscalía General del Estado demostrara su responsabilidad en el femicidio de su pareja, Rosa S., ocurrido en el cantón Santa Isabel.
Así lo decidió, por unanimidad, un Tribunal Penal del Azuay, durante la audiencia de juicio, que terminó la mañana del viernes 29 de julio de 2022. Los jueces también dispusieron al sentenciado cancelar un monto económico, por reparación integral a los familiares de la víctima.
La fiscal Blanca León relató que la investigación inició por la denuncia de la desaparición de la víctima, quien el 27 de mayo de 2020 se trasladó hacia la parroquia Cañaribamba para cumplir labores agrícolas, sin embargo, no retornó a su domicilio.
Durante las labores de búsqueda, el 4 de junio del mismo año, en la quebrada San Pedro, ubicada cerca de la vivienda de José Jonás L., fue encontrado un saco de yute que contenía fragmentos de huesos humanos y utensilios de cocina incinerados.
Enseguida se realizó un allanamiento a la vivienda del ahora sentenciado, donde se levantaron muestras de máculas de sangre. Además, frente al inmueble, se descubrió un sitio en el cual se había prendido fuego, en donde fueron encontrados restos incinerados que correspondían a fibras textiles y alambres de colchón.
Tras el desarrollo de las diligencias investigativas, se conoció que el día de su desaparición la víctima llegó al domicilio de José Jonás L. y mientras se encontraban acostados sobre el colchón, él le disparó en la cabeza. Luego le prendió fuego al cuerpo, sin embargo, el dorso de la mujer no fue incinerado, por lo que lo enterró en el sector Cebadillas. Además, los demás restos humanos los colocó en un saquillo, que fue lanzado a la quebrada.
Fiscalía presentó los testimonios de: dos médicos legistas que realizaron la autopsia y un análisis forense, del antropólogo forense quien determinó que los restos humanos pertenecen a una mujer de 38 años, de peritos encargados de efectuar pruebas de ADN, las cuales demostraron que el perfil genético que corresponde al fragmento de hueso (fémur) y a la sangre encontrada en el domicilio del sentenciado, coincide con el perfil genético de la víctima.
También rindieron sus testimonios, agentes de la Policía que investigaron el caso, que realizaron el levantamiento del cadáver, el reconocimiento del lugar de los hechos y de evidencias.}
Con los testimonios de familiares de la víctima y de la perito que realizó la valoración psicológica a los hijos de víctima, Fiscalía demostró que el sentenciado ejercía sobre su pareja, violencia física y psicológica.
Dato jurídico
El delito de femicidio está tipificado y sancionado en los artículos 141 y 142 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), con privación de libertad de veintidós a veintiséis años.
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