Los transportistas se quejan por daños constantes en las suspensiones de los buses y piden al MTOP más atención.
Los trabajos de colocación de una nueva capa de asfalto en la vía Cuenca-Girón-Pasaje, tramo San Francisco-Pasaje, siguen suspendidos. Consultado sobre el tema, el 16 de junio, el subsecretario de la regional 6 del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, MTOP, Gonzalo Cobos, dijo que hasta entonces sólo eran tres semanas de suspensión y que en el mes siguiente se retomarían los mismos, según sea el informe de fiscalización, tras uno de los controles regulares que se hacía como en toda obra.
Sin embargo, en un recorrido realizado ayer se constató que no hay trabajo alguno, excepto la presencia de unos cinco trabajadores de la empresa Carvallo, subcontratista de la empresa china Sinohydro, que realizaban limpieza de cunetas en el sector de Sarayunga. Falta por reasfaltar unos 25 kilómetros en el tramo mencionado.
En Las Palmas, comunidad del cantón Pucará, hasta donde llegó la colocación de la nueva capa de asfalto, viniendo desde Pasaje, moradores como Fernando Yunga no se explican el porqué no se reanudan los trabajos, más aún cuando en el centro de la población, ha quedado removido el asfalto y no ha sido repuesta la capa.
“El jueves santo, que dejaron esta máquina aquí, me la encargaron para tres días pero ya son tres meses y no vuelven. Oí por boca de algunas personas que han estado colocando una capa más delgada de lo contratado, supuestamente les han dado la oportunidad para que rectifiquen y no lo han hecho y por eso les han suspendido”, expresó José Cedillo, morador de la comunidad Vivar, del cantón Pucará, en cuya casa permanece una máquina que servía para el fresado del asfalto viejo.
Entre los transportistas las quejas son constantes por el pésimo estado que presenta la carretera, más cuando no se observa intervención en el tramo mencionado, al igual que en el trayecto Léntag-San Francisco, a cargo de la empresa FOPECA, desde Santa Isabel en adelante, donde incluso se han acentuado los problemas de hundimientos en el sector Puenteloma, mismos que son una amenaza para la vía.
Manuel Orellana, conductor de la unidad 30 de la empresa Rutas Orenses, se quejó por el mal estado de la vía, lo que según su testimonio causa daños constantes en la suspensión de los vehículos y cuya reposición cuesta unos 200 dólares. Hizo un llamado al MTOP para que se dé más atención a la ejecución de la obra contratada. www.elmercurio.com.ec