CUENCA SUFRE DE UN CÀNCER LLAMADO FEMICIDIO

Son 12 los casos que se tratan como femicidios en Cuenca, decenas las muertes de mujeres que, bajo otras circunstancias, han fallecido en manos de sus victimarios, cientos las mujeres agredidas que han presentado sus casos ante la justicia y miles las potenciales víctimas.

Azuay es la cuarta provincia en cifras de femicidio y una de las más violentas. Siete de cada 10 sufren algún tipo de abuso según ONU Mujeres. Los golpes, insultos y agravios son, de acuerdo con la viceministra de Justicia, Lucy Blacio, la antesala del femicidio.

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En las últimas semanas se han efectuado marchas, plantones y actividades para rechazar las muertes violentas de mujeres, la mayoría de las acciones se han concentrado en el Complejo Judicial del Azuay, pero según la jueza Soraya Quintero, especializada en temas de violencia, la sociedad y el Estado son corresponsables en este “cáncer” que pone en riesgo a las cuencanas.

Cifras

Desde el 2015, fecha en la que entró en vigencia el Código Orgánico Integral Penal, COIP, -y con este la figura del femicidio-, se han registrado en el Azuay 12 casos. Tres de ellos tienen sentencia, y los demás siguen el debido trámite procesal.

En el 2017 se han registrado seis casos, el último la muerte de una niña de 11 años a manos de su padre, registrada el pasado 8 de agosto.

Pero aún más alarmantes son las cifras de violencia contra la mujer.

Según Quintero, a la Unidad de Violencia ingresaron de enero a junio de este año, 1.050 causas, de las cuales 806 terminaron en inhibiciones.

Un total de 286 causas están en trámite, 146 terminaron en una sentencia absolutoria, 65 han llegado a sentencia condenatorias, 11 se archivaron y nueve prescribieron.

En gran parte de los casos que no llegaron a sentencia, las víctimas prefirieron no seguir adelante con el proceso penal.

El abogado David Jiménez sostiene que todas ellas son potenciales víctimas de femicidio y se suman “todas las mujeres que son agredidas y nunca ponen la respectiva denuncia”.

Familias

El femicidio es un problema de salud pública, según la jueza Quintero, y es un mal que no afecta únicamente a la víctima, sino a toda su familia y su entorno.

Marlene Villavicencio, directora de la Fundación María Amor, explica que, luego de un femicidio, los hijos de la víctima y los familiares son los proclives a sufrir daños psicológicos, “que en ocasiones son irreparables”.

Asegura que varias de las víctimas colaterales presencian la muerte de su madre y saben que “el padre es quien los dejó huérfanos, situación que les es muy difícil de superar”.

El director del Consejo de la Judicatura, Mateo Ríos, detalla que de acuerdo con el artículo 78 de la Constitución, “las víctimas colaterales de este delito gozarán de protección especial, que consiste en atenciones médicas y psicológicas de forma indefinida”.

No obstante, no siempre esta ayuda llega de forma efectiva. Uno de los casos recientes es la falta de asistencia a una niña abusada sexualmente, que durante seis meses no recibió asistencia de organismos del Estado. El juzgado a cargo del caso analiza una acción por desacato, informó el juez Luis Serrano.

Quintero asegura que el femicidio es un mal en el que la sociedad y el Estado tienen corresponsabilidad. La sociedad por “seguir naturalizando la violencia contra la mujer” y el Estado “por no prevenir de forma efectiva” este delito.

“¿Quién le hace un plantón al policía que no detuvo a un hombre que golpeó a su mujer porque la pareja llegó a un acuerdo?, ¿quién protesta contra el médico que atiende a la víctima y no denuncia el caso, o al docente que conoció del abuso y prefirió hablar con el abusador a llevarlo ante la justicia? El problema no es la aplicación del femicidio, es toda la estructura que así lo permite”.

El gobernador, Xavier Enderica, señaló en la última mesa provincial contra el femicidio, efectuada la semana anterior, que se ha hecho mucho por evitar este tipo de delitos, pero “aún nos queda un largo camino por recorrer”.

DATOS

Violencia

Según la Función Judicial, 1.050 causas se recibieron por violencia contra la mujer en lo que va del año 2017.

Afectaciones

El femicidio no solo afecta a la víctima, también a su familia que sufre daños psicológicos, en ocasiones irreversibles.

Posibles “curas”

Marlene Villavicencio enfatizó que “muchas veces por las apelaciones han caído los procesos y luego han declarado inocentes a los procesados, se ha cambiado el tipo penal o se reducen las penas a los victimarios. Es en el área penal donde se requiere de muchísima experticia de los abogados, fiscales y jueces”.

Juan Salazar, abogado que estuvo a cargo del primer caso de femicidio en el Azuay, indicó que en varios de los casos, los victimarios aluden tener problemas psiquiátricos dentro del proceso de apelación, lo cual debe ser revisado.

La jueza Soraya Quintero sostiene que la justicia penal debe ser el último escalón al cual acudir, y es necesario prevenir el delito desde la primera señal de violencia para que el femicidio no se llegue a consumar.

Recuerda también que, desde Cuenca, se planteó hace más de dos años una reforma para “romper” el nudo crítico que supone la necesidad de probar los golpes sin lesión y el daño psicológico a través de una pericia para que este tipo de agresiones sean judicializadas.

La reforma plantea separar las conductas que constituyen un daño psicológico y las otras que no lo son, pero que sí violentan sus derechos. El pedido no tiene respuesta hasta la fecha.

Femicidios 2017

1. Cristina Palacio, 28 de marzo. Carlos F. fue detenido por el caso, puede ser sancionado con privación de la libertad de 22 a 26 años, según establece el Código Orgánico Integral Penal, en sus artículos 141 y 142 sobre el delito de femicidio.

2. Blanca Olivia Duchi Carchi. Fue asesinada por su yerno el 21 de marzo en barrio La Libertad de Chilcapamba, en la parroquia El Valle. Defendía a su hija de una agresión.

3. Jéssica Viviana Gordillo Hernández, asesinada el 29 de abril en el barrio La Dolorosa, de Racar. Un menor de edad fue sentenciado a ocho años de aislamiento por el crimen.

4. Jenny Lucía Jua Quezada, asesinada en la calle José María Velasco Ibarra el 8 de junio, sector del mercado Doce de Abril, recibió varios disparos en su cuello, el presunto culpable guarda prisión preventiva.

5. Lorena Flores Jimbo fue hallada muerta el 5 agosto en la habitación de un inmueble ubicado en la calle Tomás Ordóñez y Calle Larga. Su victimario fue detenido cuando intentaba suicidarse, se lo trasladó al Hospital Regional, donde terminó quitándose la vida.

6. Una niña de 11 meses de nacida fue asesinada el 8 de agosto en el sector de Ochoa León, fue atacada por su padre cuando este agredía a su esposa; el sujeto está detenido

http://www.eltiempo.com.ec/noticias/cuenca/2/418963/cuenca-sufre-de-un-cancer-llamado-femicidio

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