Era un maestro albañil, trabajador y honesto, cada centavo que ganaba era con el sudor de su frente, como mucha gente trabajadora y honesta, que ante la agresión de delincuentes armados se defiende y en el forcejeo, terminan con la vida de sus asaltantes; así, van a parar años en prisión. El mensaje del sistema de justicia es claro entonces: déjate robar, déjate matar. Te conviene y le conviente a tu familia.
El caso a continuación, ocurrió en la República del Perú y es muy similiar a los que han ocurrido en otros países. La sentencia se la dio recientemente:
En 2013, Pedro Palacios (54), quien se ganaba la vida como albañil, fue víctima de un violento asalto por parte de dos inescrupulosos sujetos en el distrito de Ate. En un intento de defenderse, él mató a uno de los delincuentes tras arrojarle una piedra y, ahora, enfrenta cinco años de prisión.
De acuerdo a información recogida por el programa 'Punto de Vista' de ATV, Palacios puso resistencia al robo de sus pertenencias y tomó una piedra para defenderse.
El material rocoso impactó contra la cabeza de uno de los hampones, provocándole la muerte al instante.
Desde ese momento, el albañil vive una pesadilla.
Palacios y el otro ladrón del robo fueron detenidos por las autoridades, siendo la víctima sindicada como homicida, cargo por el que deberá enfrentar media década de cárcel.
"Fue en defensa propia. No tengo por qué hacerle mal a nadie. Me habrían robado mi celular y el dinero que tenía", declaró Pedro en su momento.
Para sorpresa de todos, a Juan Gutierrez Calcina, el otro delincuente, le dieron libertad y solo lo condenaron con 280 días de servicio comunitario.
La familia de Palacios exige que se haga justicia, haciendo hincapié en que las autoridades deberían encarcelar a los verdaderos criminales y no a gente inocente.
Por su parte, su abogado del albañil comparó su caso con el del suboficial Elvis Miranda, quien mató a un presunto delincuente cuando este se disponía a cometer un robo en Piura.
"La gente honrada va presa y los delincuentes están en libertad. Es lo mismo que están haciendo con el policía en Piura", protestó el abogado Mario Amoretti, quien apeló la sentencia, decisión que finalmente estará en manos de la Corte Superior de Lima.
